El Catecismo enseña a los católicos que hay diversos grados de pecado:
"Conviene valorar los pecados según su gravedad" (p. 521, #1854).
Primero están los pecados veniales:
"Se comete un pecado venial cuando no se observa en una materia leve la medida prescrita por la ley moral, o cuando se desobedece a la ley moral en materia grave, pero sin pleno conocimiento o sin entero consentimiento" (pp. 522-523, #1862).
Luego están los pecados mortales:
"El pecado mortal... Entraña la pérdida de la caridad y la privación de la gracia santificante, es decir, del estado de gracia. Si no es rescatado por el arrepentimiento y el perdón de Dios, causa la exclusión del Reino de Cristo y la muerte eterna del infierno..." (p. 522, #1861).(Véase también p. 294, #1014; p. 299, #1033; p. 300, #1035; y p. 301, #1037).
Ante la amenaza de "la muerte eterna del infierno" sobre su vida, es necesario dar respuesta a varias preguntas importantes:
- Específicamente, ¿qué constituye pecado mortal?
- ¿Cuánto arrepentimiento se necesita para ser perdonado?
- ¿Cómo sé que una persona ha sido perdonada?
- ¿Por qué la Biblia no dice nada al respecto?
Lamentablemente el Catecismo no da respuesta a ninguna de estas preguntas.
Cuando estudiamos la santa Palabra de Dios, ob-tenemos un cuadro totalmente diferente:
"Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es infracción de la ley".
1 Juan 3:4
Puesto que todos hemos quebrantado algún mandamiento de Dios, la Biblia declara que todos somos pecadores.
"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios".
Romanos 3:23
Debido al pecado, todos merecemos morir y sufrir el castigo del infierno:
"La paga del pecado es muerte...".
Romanos 6:23
La Palabra de Dios no hace distinción acerca de la gravedad de ciertos pecados. Sencillamente declara que la paga del pecado es muerte.
Pero Dios, por su gran amor y gracia, envió a su Hijo, Jesucristo, a morir en la cruz para pagar el precio de todos los pecados una vez y para siempre:
"Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios".
Hebreos 10:12
La salvación verdadera sólo se obtiene por medio de Jesucristo, porque únicamente El pudo derramar sangre inocente para pagar el castigo por todos los pecados:
"En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados".
Colosenses 1:14 "Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados".
Mateo 26:28
Dios espera que sus hijos le confiesen sus pecados a El, pero una vez que los pecados son confesados y perdonados, Dios hace una promesa maravillosa:
"Nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones".
Hebreos 10:17
Por medio de esta enseñanza se le roba a Jesucristo la honra que le pertenece. Debido al acto de amor del Señor en la cruz, sólo El merece crédito por perdonar los pecados de la humanidad.
El catolicismo, sin embargo —al declarar que hombres pecadores pueden ayudar a pagar diversos grados de pecado mediante sus buenas obras—, rebaja al Señor y le roba el honor y la gloria que únicamente El merece.
Una vez más, usted debe elegir. ¿Permanecerá sujeto al catolicismo, creyendo que algunos pecados son peores que otros, y que las buenas obras son necesarias para pagar por los diferentes grados de pecado?
¿O, confiará usted en la Palabra de Dios, la cual declara que Jesús murió para pagar el precio de todos los pecados, una vez y para siempre:
"Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras".
1 Corintios 15:3
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sus comentarios seran bien recibidos siempre y cuando tenga moderacion